Camelia sinensis L.
Descripción
Es un arbolillo muy ramificado
que en estado silvestre, puede alcanzar de 4 a 10 m de altura, pero en cultivo no se deja que
exceda de 1 m
para mantener denso el follaje y poder cosechar las hojas con facilidad. Las
hojas pueden presentar diversas dimensiones, según la variedad y procedencia.
Son persistentes, simples, con corto peciolo, oval-oblongas, acuminadas y con
los bordes finamente dentados en los 2/3 basales. Las hojas jóvenes son blandas
y tomentosas, más tarde se vuelven coriáceas y glabras. Las flores son de color
blanco-cremosas, axilares, solitarias en grupos de 2 a 3 en las axilas de las
hojas. El fruto aparece en cápsula redondeada que encierra las semillas. Las 2
variedades de té que más se conocen son la Camellia sinensis y la C.
Assamica. Pertenecen a la familia de las Theaceae.
Hábitat
Tan antiguos son el uso y
cultivo del té en Oriente que no se sabe con seguridad cual es la tierra natal
del arbusto. Se supone que es oriundo de la India, donde crece de forma silvestre en la
cuenca del río Brahmaoutra, afluente del Ganges. Actualmente se cultiva en
muchas regiones tropicales y subtropicales, sobre todo en China, India, Japón,
Sri Lanka, Indonesia y Brasil.
Composición y propiedades
Parte utilizada
Las hojas.
En el caso del té verde las hojas son recolectadas y
se estabilizan mediante vapor de agua (a presión) para inactivar los enzimas oxidativos; posteriormente las hojas son
desecadas durante un período corto de calentamiento rápido para
preservar el contenido de bioflavonoides (no sufre ningún proceso de fermentación). Está constituido por
fragmentos de hojas de color amarillo verdoso a verde pardusco, cuya estructura
original se aprecia a simple vista.
Principios activos
Existen múltiples factores que
influyen en la composición del té, la cual varía como el resto de las plantas,
según el clima, estación, prácticas de cultivo, variedad, edad de las hojas (la
calidad disminuye cuanto más viejas sean las hojas), etc.
Sin embargo, los principios
activos más importantes son:
Los derivados polifenólicos entre los que destacan:
- Flavonoides (5-10%):
kampferol, quercetol, miricetol, etc.
- Sobre todo taninos catéquicos:
catequina, epicatequina, gallato de epicatequina, gallocatequina,
epigallocatequina, gallato de epigallocatequina. Estos varían entre un 10-20%
dependiendo del cultivo y edad de las hojas. Las catequinas son compuestos
incoloros, astringentes y solubles en agua. Se oxidan fácilmente, aunque su
grado de oxidación es variable. Esta propiedad se ha empleada para utilizarlos
como antioxidante de los alimentos. En el proceso de formación del té negro los
taninos catéquicos son principalmente oxidados y se convierten en pigmentos como
la teaflavina, tearubigina, benzotropolona, teaflagalina.
- Proantocianidoles o taninos
condensados: procianidoles, prodelfinidol, teasinensinas, asamicaínas.
Puede que la peroxidasa del té esté involucrada en su generación.
- Ácidos fenólicos:
málico, succínico, oxálico, clorogénico, gálico, caféico, coumarilquínico y uno que sólo se da en el té, la treogalina (ácido
3-galoil-quínico).
Las bases xánticas o alcaloides: teofilina, teobromina y cafeína
(denominada también teína). Algunas aparecen combinadas parcialmente con los
taninos. La cafeína está presente en un promedio del 3% junto con
cantidades muy pequeñas de otras metilxantinas comunes, la teobromina y la
teofilina.
Contiene sales minerales
(destaca su contenido en flúor sobre todo en las hojas viejas. Debemos
tener presente que el té también acumula el aluminio y manganeso), vitamina C y B, sustancias
que dan color y aroma a la planta y que pueden aparecer de forma libre o
combinadas en forma de glicosilados entre ellas trazas de aceite esencial
(alcoholes alifáticos, salicilato de metilo) y carotenoides (violaxantina,
beta-caroteno, neoxantina, luteina), aminoácidos (trazas de adenina, xantina y
theamina (5-N-etil-glutamina); este último es específico del té y suele utilizarse para establecer la
calidad de la planta), saponinas triterpénicas y enzimas.
La composición del té verde es similar a la de la
hoja seca, excepto por unos cuantos cambios catalizados enzimáticamente, que
ocurren de forma extremadamente rápida tras su recolección. Durante el proceso
de secado se producen nuevas sustancias volátiles. El té Oolong está a medio
camino en su composición entre el té verde y el negro.
Acción farmacológica
- Estimulante del sistema nervioso
central (bases xánticas). Parece ser que el mecanismo de acción de estos
alcaloides está relacionado con la inhibición de las fosfodiesterasas del AMPc,
y en menor medida, del GMPc, incrementando así las concentraciones
de estos mediadores celulares. La acción estimulante del té verde es más suave
pero más duradera que la del café. El efecto de las bases xánticas (sobre todo
cafeína y teofilina), que inhiben la fosfodiesterasa (con lo cual se favorece
la actividad de las catecolaminas por aumento del AMPc ) es modulado
por los polifenoles que, al bloquear la enzima O-metiltransferasa, responsable
de la destrucción de la adrenalina, ésta se mantiene elevada en sangre durante
más tiempo, con un efecto lipolítico añadido.
- Aumenta el estado de vigilia y
la capacidad de realizar esfuerzo físico.
- Produce
estimulación cardíaca (inotropa positiva) y vasodilatación periférica. Aumenta
la frecuencia cardíaca favoreciendo la circulación y aumentando el aporte de
sangre, sobre todo hacia las arterias coronarias que irrigan el músculo
cardíaco, y al resto del organismo, entre ellos al riñón con un efecto
diurético.
- Estimulante
del centro respiratorio. La
teína acelera el transporte de determinados analgésicos (aspirina, fenacetina)
por la sangre, y al ser estimulante cardiorrespiratoria contrarresta el efecto
depresivo del abuso de alcohol, barbitúricos y morfina. Los polifenoles hacen
que la acción de la teína sea menos brutal pero más pronunciada que la de la
cafeína.
- Estimula la
actividad cerebral la cual se agudiza facilitando de esta manera el trabajo
intelectual.
- Estimula la musculatura
esquelética.
- Diurética
(bases xánticas y polifenoles). Esta acción se debe al aumento de la filtración
glomerular y disminución de la reabsorción tubular.
- Hipolipemiante o lipolítica (polifenoles). El extracto de té verde ha
demostrado en animales de laboratorio una normalización de los niveles de
colesterol total, de peróxidos lipídicos y de fosfolípidos séricos. Previene la
disminución de lecitina sin modificar las tasas de triglicéridos y
HDL-colesterol. Produjo también una disminución del acumulo de lípidos en el
hígado y en la aorta. En ensayos
epidemiológicos se ha comprobado en poblaciones consumidoras de té, una menor
incidencia de accidentes cardiovasculares arterioscleróticos.
- Antiagregante plaquetario
(polifenoles).
- Vasoprotector, tónico venoso y acción vitamínica P (polifenoles: flavonoides y catecoles). Produce vasoconstricción
en el lecho vascular cerebral.
- Antioxidante, antiinflamatoria e inmunomoduladora (polifenoles). Los
flavan-3-oles son inhibidores de la peroxidación lipídica a nivel mitocondrial,
actuando como antirradicalares. Las catequinas y otros bioflavonoides
exhibieron una acción antioxidante similar a la vitamina C y a la vitamina E,
las cuales también han demostrado reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer
cuando se toman como suplementos o en grandes proporciones de forma natural en
la dieta. Existe un interés creciente en los efectos biológicos de los
polifenoles derivados del té y muchos estudios in vitro e in vivo están
demostrando sus propiedades antioxidantes.
- Broncodilatadora. Las bases xánticas producen relajación del músculo liso
bronquial.
- Según
algunos autores aumenta la secreción ácida gástrica y según otros protege el estómago contra la
acidez y las úlceras. Estudios realizados en Japón con el té verde (sobre todo
el descafeinado) sirvieron para observar su efecto antiulceroso ya que, además
de su acción antibacteriana, tiene la capacidad de estimular la proliferación
de las células y el moco de la mucosa gástrica formando una barrera protectora
frente al ácido clorhídrico.
- Acción
antitumoral. Diferentes catequinas y extractos de té se han ensayado en varios
modelos animales e in vitro, en células tumorales y líneas celulares
establecidas. En ellos se ha demostrado inhibición de diferentes procesos
bioquímicos relacionados con la carcinogénesis, especialmente con la
proliferación celular, la inducción de apoptosis de células neoplásicas y
paraneoplásicas, así como la inhibición de la invasión tumoral y la
angiogénesis.
- Acción
protectora contra la caries dental. Por su acción antibacteriana y su riqueza en flúor puede utilizarse,
en forma de enjuagues, para prevenir la formación de placas dentales y evitar
la caries. Su extracto puede utilizarse como purificador del aliento.
- Disminuye
la absorción de determinados nutrientes. Los taninos interfieren a nivel
intestinal con los enzimas digestivos. Posee un efecto inhibidor de la enzima
alfa-amilasa, salivar e intestinal, por lo que se ha utilizado para controlar
la obesidad y diabetes. Además, favorece el que “quememos” grasa para obtener energía
al disminuir la disposición de glucosa.
- Astringente. El té negro es menos
astringente que el verde por lo que resulta muy útil en caso de diarreas.
- Antibacteriana.
Experimentalmente se ha comprobado su acción bactericida frente al vibrión colérico,
inhibiendo su actividad hemolítica, por lo que se sugiere su utilidad como
preventivo del cólera. También se ha observado que posee una acción
antibacteriana y, en estudios in vitro,
vieron que las catequinas, sobre todo del té negro, inactivan e inhiben los
virus de la gripe.
- El té verde ha encontrado una
aplicación en el campo de las exploraciones médicas complementarias, al
observarse que aumenta la claridad de las imágenes de la resonancia magnética
del tracto digestivo, haciendo más visible la cabeza del páncreas, las paredes
gástricas y la porción descendente del duodeno.
- La teína acelera el transporte
de determinados analgésicos (aspirina, fenacetina) por la sangre, y al ser
estimulante cardiorrespiratoria contrarresta el efecto depresivo del abuso de
alcohol, barbitúricos y morfina. Los polifenoles hacen que la acción de la
teína sea menos brutal pero más pronunciada que la de la cafeína. La teofilina
es relajante de la musculatura lisa, sobre todo la bronquial, diurética y
vasodilatadora periférica. La teobromina es diurética y estimulante del músculo
cardíaco.
- La teanina
es un aminoácido encontrado comúnmente en el té, capaz de producir una
sensación de relajación. La teanina produce estos efectos aumentando el nivel
de la producción del ácido gamma-aminobutírico (GABA), afecta los niveles del
serotonina y de la dopamina en el cerebro e inhibe la toxicidad excitable del
ácido glutámico. Es capaz de cruzar la barrera hematoencefálica. Se teoriza que
las características de asociación de la teanina con el GABA, reducen el poder
estimulante de la cafeína contenida en el té negro, en comparación del café.
También promueve la producción de las ondas alfa en el cerebro, asociadas
comúnmente al estado de vigilia. La teanina no se elimina en el proceso del
descafeinado, ya que no es un alcaloide. Otras investigaciones encontraron que la L-teanina puede ayudar
en la respuesta inmunológica del organismo al elevar la capacidad inmunitaria
de las células T. Sin embargo estas acciones son mínimas ya que la cantidad de
teanina contenida en el té es muy pequeña.
Indicaciones
- Astenia,
agotamiento físico e intelectual.
-
- Prevención de tromboembolismos.
Formas de preparación
Al verter agua
caliente sobre el té verde, las
sustancias solubles del té (cafeína, polifenoles y varios componentes volátiles
como los aceites esenciales) pasan al agua a un ritmo de concentración que va
disminuyendo con el tiempo.
Para extraer todo el sabor del té, para el té verde la temperatura del agua debe oscilar entre los 70 y los 95º
C.
Las dos acciones más destacadas
del té verde son: su efecto estimulante y su efecto astringente. Según queramos utilizar
una u otra realizaremos su preparación.
- Si se quiere su efecto
estimulante: poner a hervir, aproximadamente medio vaso de agua, cuando hierva
añadir 1 cucharadita de postre de planta, dejar hervir 2 minutos y colarlo. Enfriar y tomar varias tazas al día.
- Si se quiere su efecto
astringente: poner a hervir, aproximadamente medio vaso de agua, cuando hierva
añadir 1 cucharadita de postre de planta, dejar hervir 10 minutos y colarlo. Enfriar y tomar 2-3 tazas al día.
Esto es debido a que la cafeína se extrae
rápidamente en agua caliente. Sin embargo, si el tiempo de cocción es más largo
los principios activos que más se extraen son los taninos, los cuales se unen a
la cafeína y la inactivan disminuyendo su efecto estimulante.
Contraindicaciones
- Las personas
con alergia o hipersensibilidad reconocida a la cafeína o taninos deben evitar
el consumo de té.
- Ansiedad,
nerviosismo e insomnio: por su efecto estimulante sobre el sistema nervioso
central.
- Úlcera péptica y gastritis: por el efecto ulcerogénico de los taninos, y por la
estimulación de la secreción gástrica. Según algunos autores protege al estómago contra la
acidez y las úlceras.
- No se
recomienda durante el primer trimestre del embarazo. El té verde en pequeñas
cantidades se considera posiblemente seguro. Sin embargo, no se aconseja tomar
más de 2 tazas al día de té verde. Esta cantidad de té proporciona alrededor de
200 mg de cafeína. La cafeína cruza la placenta y el consumir más cantidad ha
sido asociada con abortos espontáneos, retraso en el crecimiento intrauterino,
y bajo peso al nacer. También el consumo cuantioso de cafeína durante el
embarazo puede aumentar el riesgo posterior de desarrollo de SIDS (síndrome de
muerte súbita en recién nacidos). La cafeína en dosis muy altas ha sido
asociada con defectos genéticos, incluyendo malformaciones de miembros o
paladar.
- En la lactancia no se recomienda. Las bases xánticas pueden pasar a la leche materna
y producir insomnio en el lactante.
- En niños menores de 12 años debido a su efecto estimulante.
Precauciones
- Arritmia cardíaca e hipertensión arterial: por el efecto estimulante del centro
cardiovascular del bulbo raquídeo.
- Hipertiroidismo: puede agravar los síntomas hipertiroideos.
- Espasmofilia.
- Se recomienda
la ingesta abundante de líquidos para evitar la deshidratación.
- La cafeína en diabéticos puede producir efectos impredecibles sobre la glucemia,
bien incrementando o reduciendo los niveles de glucosa en sangre. Se
recomienda, por tanto, un consumo moderado de esta sustancia en los diabéticos.
- Se ha observado que existe una
cierta correlación significativa entre un mayor aumento del consumo de ciertos
tipos de té muy ricos en taninos condensados (hojas viejas) con una mayor
tendencia a padecer cáncer de esófago.
- Los potenciales beneficios de
un consumo moderado de té (pues contiene cafeína) se refuerza al tomarlo con
alimentos con poco hierro.
- En las investigaciones preliminares se ha asociado el té verde con la reducción
de los niveles de estrógenos en el cuerpo. Sin embargo, no está claro si pueden
ocurrir efectos secundarios significativos como consecuencia de ello.
Interacciones medicamentosas
- La cafeína interacciona con los inhibidores de la monoaminooxidasa
(IMAOs) potenciando los efectos simpaticomiméticos de estos que pueden
traducirse en arritmias cardíacas o grave hipertensión. El consumo de café esta
contraindicado durante el tratamiento con IMAOs (p.ej. furazolidona,
procarbazina, y selegilina).
- La cafeína puede contrarrestar la somnolencia y la lentitud mental
causada por benzodiazepinas como lorazepam (Ativan®) o diazepam (Valium®).
- Tampoco se deben administrar barbitúricos junto con cafeína, en primer
lugar por ser los primeros inductores del metabolismo hepático con la
consiguiente reducción de los niveles plasmáticos de la cafeína y en segundo
lugar por poder anular la cafeína los efectos hipnóticos de los barbitúricos.
Otros inductores del metabolismo hepático (fenitoína, rifampicina, etc) pueden
igualmente reducir la eficacia de la cafeína.
- Puede incrementar el efecto de
algunos vasodilatadores coronarios (dipiridamol).
- Puede tener un efecto
sinérgico con sulindac y tamoxifeno, reduciendo sus efectos indeseables.
- La cafeína produce inhibición
del efecto antipsicótico de la clozapina por posible antagonismo dopaminérgico.
- La cafeína puede potenciar los efectos estimulantes de la nicotina,
agonistas beta-adrenérgicos como el albuterol (Ventolin®) u otras metilxantinas
como la teofilina.
- La cafeína puede bloquear los efectos de la adenosina, pero esto lo hacen
únicamente cuando los niveles plasmáticos son muy elevados, mayores que los que
se obtienen utilizando dosis terapéuticas. Sin embargo, este efecto antagónico
se debe tener en cuenta si se administran dosis elevadas de cafeína.
- La cafeína debe ser evitada o utilizada con precaución si el paciente se
encuentra medicado con metilfenidato, modafinilo, pemolina, seudoefedrina o
beta bloqueantes u otros simpaticomiméticos. La combinación de cafeína con
estos fármacos puede producir nerviosismo, irritabilidad, insomnio y arritmias
cardíacas.
- Puede interactuar con
warfarina.
- La cafeína interfiere con los efectos de la creatina (una sustancia utilizada
para incrementar los efectos ergogénicos de la musculación). Se ha comprobado
que una dosis de 5 mg/kg/día de cafeína elimina por completo los efectos de
creatina sobre la contracción muscular, si bien la cafeína no interfiere con la
capacidad de creatina para aumentar los efectos de fosfocreatina en el músculo.
- Xantinas: el té puede potenciar la hiperexcitabilidad producida por el café, la
teofilina, el mate, guaraná, etc.
- Digitálicos:
debido a la hipopotasemia que puede producir.
- Medicamentos
estimulantes como Ritalin: Podrían aumentar los efectos estimulantes del té
negro.
- Cuando se toman con cafeína, numerosas drogas pueden incrementar los
niveles de cafeína en la sangre o el tiempo que ésta actúa en el cuerpo,
algunos de estos ejemplos son disulfiram (Antabuse®), anticonceptivos orales o
terapia de reemplazo hormonal, fluvoxamina (Luvox®), cimetidina (Tagamet®),
verapamil y mexiletina.
- Los niveles de cafeína se pueden reducir con la ingestión de dexametasona
(Decadron®).
- No se recomienda usar la fenilpropanolamina y la cafeína juntas debido a
que pueden producir ocasionalmente
accidentes cerebrovasculares, por lo que la administración conjunta de ambos
fármacos debe ser evitada.
- Las quinolonas antibacterianas (norfloxacina, ciprofloxacina, enoxacina,
etc) reducen la eliminación de la cafeína, lo que puede originar un aumento
exagerado de los efectos farmacológicos de esta sustancia.
- La cafeína tiende a aumentar la excreción de litio.
- Aunque la cafeína por sí sola no parece tener propiedades para aliviar el
dolor, se usa en combinación con el tartrato de ergotamina en el tratamiento de
migrañas o dolores de cabeza en racimos (Cafergot®). Se ha mostrado que
incrementa los efectos calmantes del dolor de cabeza de otros paliativos del
dolor como el acetaminofén y la aspirina (ej. Excedrin®). La cafeína puede
también incrementar los efectos paliativos de la codeína o del ibuprofeno
(Advil®, Motrin®).
- Por su contenido en taninos,
si se administran conjuntamente, pueden disminuir la absorción intestinal del
hierro alimentario, de teofilina.
Efectos secundarios y toxicidad
El
té generalmente no produce efectos adversos. Los efectos adversos más
frecuentes se dan en personas que consumen grandes cantidades de té al día. Los
efectos secundarios de la cafeína (teína) son generalmente leves y
transitorios; aunque las diferencias individuales pueden ser importantes.
- Digestivos:
gastralgia, náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento, úlcera péptica,
anorexia, debido a su
contenido en taninos.
- Neurológicos-psicológicos: insomnio, excitabilidad, nerviosismo, y más
raramente, temblores, palpitaciones, cefaleas.
- Alteraciones cardiocirculatorias:
taquicardias, palpitaciones, hipertensión, etc.
- Renales: la
cafeína actúa en los riñones como diurético (aumentando la orina y los niveles
de sodio/potasio en la misma y potencialmente disminuyendo los niveles de
sodio/potasio en la sangre), y puede empeorar la incontinencia.
- Metabólicas:
elevación en los niveles de azúcar en la sangre, deficiencia de hierro, etc.
- Hepáticas. Se ha descrito
hepatotoxicidad de una fracción extractiva de la planta, siendo esta retirada
del mercado en nuestro país (Dueñas Sadornil C y cols 2004).